Año de Misión
Quienes acogen con sinceridad la Buena Nueva, mediante tal acogida y la participación en la fe, se reúnen pues en el nombre de Jesús para buscar juntos el reino, construirlo, vivirlo. Ellos constituyen una comunidad que es a la vez evangelizadora. La orden dada a los Doce: "Id y proclamad la Buena Nueva". La Buena Nueva del reino que llega y que ya ha comenzado, es para todos los hombres de todos los tiempos. Aquellos que ya la han recibido y que están reunidos en la comunidad de salvación, pueden y deben comunicarla y difundirla. (Exh. evangelii nuntiandi. 13)
Con el entusiasmo que brota del corazón de la Iglesia de América Latina y el Caribe que se encuentra en estado de misión permanente; también la Congregación ha querido abrir las puertas a la juventud, dándoles la oportunidad de realizar un año de misión en nuestras obras apostólicas.
El objetivo principal de este año de misión es llevar a que las jóvenes experimenten más de cerca el amor de DIOS, le conozcan, le amen y le sigan, descubriendo así la vocación que el Señor tiene para cada una de ellas.
Desde esta experiencia ellas maduran su experiencia de fe y de vida cristiana y se sienten más corresponsables con la misión de la Iglesia.